3.4.06
debe y haber
Y es que las sonrisas pasan a risas con cierta facilidad, a pesar de que a mí lo evidente me cueste tanto verlo. Finalmente los adornos son solo eso, cosmética que nada tiene que ver con lo esencial y que estorban la conversación. El balance es tan indeterminado como mi propia incapacidad para analizar la realidad.
